Si hace un par de años alguien me hubiera dicho que Nintendo iba a lanzar una consola que revolucionaría -de nuevo- el mundo de los videojuegos, lo habría mirado con un poco de incredulidad. Pero si esa misma persona me hubiera dicho que Nintendo le prestaría a Ubisoft dos de sus más grandes propiedades intelectuales y que pronto habría un juego de Mario hecho por la compañía francesa y que además Fox McCloud y todo el combo de Star Fox harían parte del lanzamiento de una nueva franquicia de Ubisoft, lo habría tildado de loco. Pues bien, esto es, básicamente Starlink: Battle For Atlas.
A primera vista, todo es muy confuso, sobre todo porque en ningún momento Nintendo anunció que iba a lanzar un juego de Star Fox, pero la explicación es muy sencilla. Starlink: Battle for Atlas es un juego para las consolas PlayStation 4, Xbox One y Nintendo Switch. Es solo que en su versión para la Switch, el juego incluye -y de manera magistral- una versión en la que Fox McCloud, sus compañeros e inclusos sus naves Arwing hacen parte del universo de Starlink e incluyen toda una historia propia que va de manera paralela a la historia principal del juego. Nosotros, por fortuna, tuvimos la oportunidad de jugar su versión de Nintendo Switch.
El universo de Starlink: Battle for Atlas
Su historia es muy sencilla. En el sistema solar Atlas (de ahí su nombre), se está luchando una batalla por el Nova, un poderoso elemento que permite darle energía a las naves y le ha permitido a la humanidad viajar por el universo. Es así como la nave Equinox IV y su tripulación comandada por St. Grand llega al sistema solar Atlas en búsqueda de unos antiguos artefactos que le pertenecían a la extinta raza de los Wardens y que harían más fácil el minar y producir el Nova. El problema para ellos es que en la misma búsqueda se encuentra la Legión de los Olvidados una de las tantas razas que existen en el universo, pero que han sido corrompidas por el mal uso del Nova y que se encuentran también en la búsqueda de la tecnología de los Wardens para minarlo y aumentar su poder.
En este encuentro entre la tripulación de la Equinox IV y la Legión, se libra una batalla que termina en la captura de St. Grand y la derrota de toda la tripulación de la Equinox IV quienes, en el último momento, se salvan gracias a la ayuda de Fox McCloud y sus amigos (esto si lo estás jugando en Switch, en PS4 y Xbox One se deben salvar por sus propios medios, supongo).
De ahí en adelante, la versión para Switch mezcla la historia principal del juego con la búsqueda de Fox McCloud de Wolf O’Donell, su némesis de costumbre y quien al parecer, ha formado una cierta alianza con la Legión de los Olvidados, lo que une las dos historias y de una u otra forma, logra que la la historia del combo de Star Fox se convierta en una especie de DLC integrado al juego y duplica el contenido que las versiones de PS4 y Xbox One tienen.
El concepto Toy-To-Life de Starlink
Desde que Ubisoft comenzó a promover el juego, habló de un concepto que va ligado a una serie de juguetes que van conectados a los controles de cada consola. Estos juguetes, que en su versión básica o ‘starter edition’ se consiguen desde los $75 USD en tiendas como Amazon o Walmart cambian el concepto de juego tradicional y cuando tienes cierta nave puesta, cierto piloto o cierta arma, el cambio que hagas en tu juguete físico se verá reflejado en tiempo real en la nave dentro del juego, permitiéndote una enorme cantidad de combinaciones de naves, alas, pilotos e incluso, el poner las armas apuntando hacia atrás, ya que no sabes de quién tendrás que cuidarte a tus espaldas.
La historia de esto, es que Ubisoft Toronto encargó a un pequeño grupo de desarrolladores que pensaran en ideas para crear nuevas propiedades intelectuales y dentro de una de tantas ideas que tuvieron, estuvo la del universo de Starlink, pensada desde el principio para que tuviera esa interacción con los juguetes, lo que generaría mayores ventas, ya que adicional a la ‘starter edition’ de $75 USD hay otras 4 naves adicionales que puedes comprar, cada una a $25 dólares y otros 4 pilotos cada uno a $8 dólares, lo que suma un total de $207 dólares si quieres tener la colección completa del juego. Esto llamó poderosamente la atención de Yves Guillemot, CEO de Ubisoft a nivel mundial y un par de años después, Starlink y sus juguetes es hoy una realidad.
La jugabilidad
Luego de la batalla entre la tripulación de la Equinox y la Legión, te encuentras abandonado en uno de los planetas del sistema Atlas. Tu nave apenas logra moverse y tu impulsor para salir al espacio se encuentra dañado, por lo que debes repararla con la ayuda de ciertos seres que vas a encontrarte.
Aquí llega una especie de revelación y es que Starlink es muy parecido, al menos al principio, con No Man’s Sky y eso, al menos para mi, fue algo terrible, ya que el NMS es uno de los pocos juegos que ha logrado dormirme -literalmente- y he abandonado a las pocas horas de juego. Sin embargo, esta similitud es solamente en la parte gráfica, ya que a diferencia de NMS, Starlink sí tiene un propósito, hay una historia allí que soporta el juego, para hacerlo entretenido y no sentir simplemente que estamos divagando por el universo sin saber bien el cómo o el por qué. Hay que aclarar también que Starlink no tiene una generación de mapas y escenarios ‘procedurales’ como si lo tienen el NMS, por lo que es un universo sólido y sin sorpresas, bugs o glitches.
El juego también tiene una muy buena introducción a sus mecánicas, tanto físicas como en su interacción con el medio ambiente, ya que el hecho de que no puedas despegar e irte del planeta, te obliga a aprender muy bien cómo debes hacer las cosas durante el resto del juego, pero con la libertad de poder moverte libremente por todo el planeta, para explorarlo, descubrirlo y decidir qué quieres hacer en él.
Yo, que soy un completionist, estuve un muy buen rato dando vueltas en el planeta, rescatando la mayor cantidad posible de personas, eliminando todas las bases enemigas, sus extractores de energía y sus centros de investigación. Ayudé en todo lo que pude a quien se convierte en nuestro primer aliado extraterrestre en el juego y solo cuando pude salir del planeta y vi los créditos de apertura del juego, fue que entendí la magnitud de juego que es Starlink.
Un juego Open Universe
Ya que los juegos Open World están tan de moda, Starlink logra ir mucho más allá y nos presenta todo su universo para explorarlo. Ir de un planeta a otro requiere una buena inversión de tiempo, no solo por la distancia, si no porque en el camino te encontrarás muchas otras cosas por hacer.
En tu radar aparecerán restos de naves abandonadas que contienen un buen loot. También serás atacados por grupos de forajidos espaciales y en la medida que lo hagas, irás descubriendo dónde están sus guaridas para obviamente ir a atacarlas y demostrar todo el poderío de tus naves y tus armas. Particularmente, esto me ha parecido lo más entretenido del juego y es bueno que cada guarida tenga un nivel de dificultad diferente, ya que de lo contrario habría hecho todas estas misiones seguidas.
En total tendrás 9 planetas para explorar, cada uno con un clima, gravedad, terreno y condiciones diferentes. También en cada planeta podrás realizar muchas actividades distintas, pero que luego de un rato empiezan a volverse un poco repetitivas. Esto le quita un poco de ritmo al juego y hace que quienes somos incapaces de avanzar hasta no haber hecho todo, tardemos mucho más en ir de un planeta al otro. Por otro lado, esto también es bueno porque subirás de nivel rápidamente y cuando continúes en la historia tendrás una gran ventaja sobre tus enemigos. Unas por otras.
Los personajes
Starlink tiene un problema muy grave en su versión para la Switch y es que es inevitable querer jugarlo solo con Fox McCloud. Por esta razón, los otros pilotos tardan un poco en desarrollarse y mostrarnos las historias personales de cada uno, pero para eso el juego tiene una misión dedicada exclusivamente a introducirnos en su lore.
Si juegas con Fox o con cualquier otro piloto, en un punto del juego tendrás que recuperar los archivos que tiene St. Grand sobre cada uno y es así como te enteras que Calisto Chase Da Silva es una piloto brasileña considerada todo un fenómeno de las pistas y que Hunter Hakka es un ex-soldado con un oscuro pasado y que decidió vivir una vida mucho más espiritual.
También conocerás a Mason Rana, un joven piloto e inventor, a Shaid, una ex-pirata que posee muchos enemigos en el sistema Atlas, a Razor Lemay, una piloto amante de la música metal y que además es la mecánica del Equinox, a Levi McCray, un ¿YouTuber? ¿Influencer? que en busca de clics para sus contenidos en redes decidió unirse a la tripulación de la Equinox y finalmente a Judge, un extraterrestre que fue encontrado por St. Grand en el círculo ártico de la tierra y quien es una entidad conformada por muchos seres vivientes, una especie de enjambre vivo que comparte un solo cuerpo. Este último es de particular importancia en el juego, ya que en las primeras misiones verás que toda la historia de St. Grand, el Nova, la Equinox y el misterio del origen de la especie de Judge, son el pilar de la trama.
Lo bueno
Definitivamente, este es un juego muy divertido. Es un título que sin muchas expectativas ni una campaña de mercadeo tan grande como la de Assassin’s Creed: Odyssey (también de Ubisoft), llega para sorprender y reinventar todo el género de los combates con naves espaciales, tratando de introducir una nueva franquicia de videojuegos que incluyen juguetes para ayudar a construir su historia (como ya lo hicieron Skylanders o Disney Infinity).
Es también una gran ventaja que el juego tenga la opción de poder jugarse sin necesidad de tener los juguetes físicos y que si bien la experiencia de juego es distinta, no cambia en ningún momento el desarrollo de la historia.
Visualmente el juego también es sorprendente y aunque en su versión de Switch la calidad visual del mapa no es como la de su versión de PS4 y Xbox One, en el modo de televisión se ve realmente bien.
El trabajo con cada uno de los planetas es increíble. Los escenarios están muy bien logrados y la evolución de la fauna y la flora se siente muy acorde con el clima y las características de cada planeta.
Los combates en el espacio son extremadamente divertidos, por lo que si tienes un buen nivel de experiencia y te encuentras con un grupo de piratas, esas pequeñas batallas serán todo un reto. El balanceo entre las armas también está muy bien logrado y a lo largo del juego te obliga a ir cambiando tus armas. Para combatir el hielo, tendrás que hacerlo con fuego, la gravedad tendrás que enfrentarla con el arma de stasis que detiene los objetos y en ocasiones, solo las armas de fuerza bruta te permitirán avanzar.
Su versión para la Switch es la más entretenida de todas, dándote mucho más contenido de juego y la sensación de poder jugar al mejor juego de Star Fox que se haya hecho hasta el momento.
Lo malo
Si tienes PlayStation 4 o Xbox One, pues eso, que no podrás jugar con Fox McCloud.
Si como yo, eres de aquellos que presta especial interés en la historia de los juegos, este, al igual que otras grandes franquicias como Destiny, tienen todo su contenido esparcido dentro del juego y si bien en las escenas cinemáticas te desarrollan la trama principal, es en las conversaciones que tienes con cada uno de los personajes que te encuentras a lo largo del juego o a medida que vas descubriendo los antiguos templos de los Wardens que te irás dando cuenta realmente de qué es lo que está sucediendo. Esto suele ser muy común en juegos que están enfocados en un público infantil, pero que terminamos siendo los adultos quienes terminamos jugándolo.
Esto de tener que ir descubriendo las cosas por cuenta propia, también complica algunos aspectos fundamentales del juego. Por ejemplo, luego de que te vas de un planeta, este puede volver a ser atacado por la Legión y volver a tener el control sobre su superficie. Para esto deberás dejar armerías puestas en puntos estratégicos, que lo defenderán de los ataque. Sin embargo, esto solo lo deduces cuando entras al mapa estelar y ves la barra de tu dominio vs el de la Legión al lado de cada planeta. Puede ser que me lo hayan explicado en alguna conversación, pero yo realmente no lo leí.
El port para Switch tiene un problema que no he visto en otros gameplays de PS4 y Xbox One y es que cuando estás utilizando el hyper impulsor en el espacio para poder atravesar rápidamente la galaxia, de la nada aparecen frente a ti asteroides y grandes objetos que no veías en el horizonte si no hasta que los tienes encima y chocas con ellos. Esto también se nota un poco en el horizonte de los mapas en cada uno de los planetas, aunque navegando cerca a la tierra no hay problema.
Si llegaste a Starlink con el «Starter Edition» y ya lo estás jugando con los juguetes físicos, es posible que te quedes corto en el juego si no tienes el resto de naves y pilotos. También el alto costo que puede llegar a tener si decides tener el juego completo, aunque si lo comparamos con las ediciones especiales para coleccionistas que vemos en el mercado hoy en día, es un valor que ronda el promedio. Aunque si eres un niño y tus papás no quieren comprarte más naves o si te gusta mucho el juego y no tienes cómo completarlo todo, esto perfectamente podría estar en…
Lo feo
El grinding. Definitivamente es un universo muy grande y explorable para que en el juego tengas que hacer siempre lo mismo cada vez que llegas a un planeta diferente. Escanear y analizar la fauna de cada planeta, recoger muestras de la flora, liberar minerías, centros de investigación, armerías y observatorios está bien en los primeros dos o tres planetas. De ahí en adelante esto se convierte en una especie de tortura, sobre todo para quienes, como yo, tenemos una especie de trastorno obsesivo-compulsivo de dejar los mapas limpios, sin ninguna actividad por realizar.
Aunque, para esto tengo un pequeño consejo aprendido a las malas y es que no hagas todas las actividades en un planeta de forma random. La mejor forma de hacerlo es llegar a alguna de las estaciones aliadas y ofrecerte a ayudarles. Así, el guardián de cada estación te enviará a realizar algo que ayudará con el progreso dentro del mapa y que por sencillo que parezca, luego de terminada la misión, esto podrá dejarte cerca de alguna otra actividad a realizar. Esto es especialmente útil en las actividades de escaneo de ADN de la fauna local, así no tendrás que hacerlo dos veces y este ítem estará chequeado en tu lista.
Y finalmente, debe ser muy feo para quienes están jugando al Starlink en PS4 y Xbox One y ven los gameplays de la versión de Switch. Afortunadamente tuvimos la oportunidad de probar el juego y luego de un buen rato de juego solo podía hacerme la pregunta ¿alguien la versión de Switch jugará con alguien diferente a Fox McCloud?
El veredicto
Starlink: Battle for Atlas será, muy posiblemente, una de las mayores franquicias propias que desarrolle Ubisoft durante los próximos años. Tiene una historia sólida, un universo muy interesante y un abanico de posibilidades muy grande para darle trascendencia a cada uno de sus personajes. Desligarse a futuro de su conexión con el universo de Star Fox será difícil, pero eso depende, básicamente, del nivel de contenidos que generen a futuro para la saga.
Starlink es, según la propia Ubisoft, el juego Open World más grande que han producido hasta la fecha y sus aspiraciones con él seguramente están a la altura. Es también la puerta para que Nintendo saque un mayor provecho de una de sus franquicias propias más queridas por los fans y que sea este el primer paso para que algún día veamos un juego de Star Fox de mundo abierto.
Fecha de Lanzamiento: Octubre 16 de 2018
Estudio: Ubisoft Toronto
Publisher: Ubisoft
Disponible en: PlayStation 4, Xbox One, Nintendo Switch
Género: Acción, aventura
Nota: 7 / 10
¡Gracias por leer!